Así, fueron estos colonos españoles con su herencia árabe y los franceses los que los introdujeron en el continente americano.
Actualmente, la alcachofa se ha convertido en un vegetal insustituible por el sabor tan peculiar con ese toque amargo y es muy utilizado en la gastronomía de todo el mundo.
El problema es que es un fruto de temporada, sino de invierno y por lo tanto es imprescindible envasar esa joya para poder consumirla todo el año. Una opción de compra es buscar alcachofas avaladas por denominaciones de origen, como las de Tudela (Navarra) o Benicarló (Castellón).
En cuanto a sus propiedades, la alcachofa es mucho más que un alimento sabroso y depurativo. Es un producto natural ideal para prevenir y tratar diferentes afecciones metabólicas, como el colesterol alto o la hipertensión.
Otras ventajas son la mejora del funcionamiento del hígado y la vesícula; Favorece la digestión y ayuda a eliminar las toxinas por la orina.
Contiene además las vitaminas A y C que le confieren u efecto antiradical,antioxidante y antiinflamatorio.
Por estos y muchos más motivos, los nutricionistas recomiendan la inclusión de esta verdura de temporada en nuestra dieta, como alimento saludable. Y nosotros te animamos a consumirla también en conserva por su inmediatez a la hora de consumirla y para que la puedas disfrutar todo el año.